Si algo sabemos desde pequeños es que cualquier cosa puede ser una portería, desde una chancla, hasta una bolsa o cualquier palo. Los hay que son profesionales y deciden pintar el tronco con los colores del resto de la portería. Buen trabajo.
Un estudio muestra que los aficionados al fútbol sienten el mismo nivel de excitación cuando ven un partido de fútbol importante que cuando hacen el amor. ¿Os pasa también a vosotros? ¿Y a las chicas futboleras?