A ver, no me sé el reglamento arbitral del fútbol en España pero ME PARECE, que no sé, que meterle el dedo en la boca a tu rival no se considera falta y anda que no joribia.
Si es que el que tiene clase y calidad, a los 16 años (y antes) ya se le nota. Este es Andrea Pirlo en 1995 cuando tenía 16 años y jugaba en el Brescia. Tremendo.