El efecto Messi en sus oponentes es: baile, gimnasia rítmica, natación, aeróbicos, volteretas, vuelos, gangnam style, gateo, patinaje… y luego los deja KO. Es un crack, y punto.
Hasta cuando un compañero o un rival se lesionan, Cesc Fàbregas sigue asistiéndole, aunque sea ayudando a llevar la camilla. Este hombre no puede ser más crack. Tiene la enfermedad de la asistencia!
Igual Neymar quiere iniciarse en lo de la natación sincronizada…pero vamos, tiene toda la pinta de estar burlándose del piscinazo de Cristiano. Un provocador nato.