Parece ser que Lennon, asistente del entrenador del Celtic, el partido le pareció aburrido y se echó una siesta en el banquillo. ¡Qué falta de profesionalidad!
Ya hasta los periódicos ingleses se ríen del anorak enorme de Wenger… ahora le piden a sus lectores que le saquen tarjeta roja por llevar ese atuendo. Ande él caliente, ríase la gente.