Ese Ivan Novoseltsev que tiene el valor de pedir matrimonio a su novia delante de todos sus compis, toda su afición (unas 200 personas en la grada, ojo ahí). ¡Menos mal que dijo que sí!
Deportistas que lo mismo te juegan un partido de fútbol que que te hacen el salto de la rana o te bailan el típico baile ruso. Evoué, del Arsenal, es uno de ellos.