Pepe lo tenía a huevo para entrar a matar, hacer un penalti y romper una tibia y peroné por el camino, pero no, pero toca el balón y hace lo imposible por no tocar al jugador del Barça, Iniesta. Pepe, estamos orgullosos de ti, joe.
Quién le iba a decir a estos niños de la cantera que algún día serían los inconfundibles Messi, Xavi, Iniesta, Piqué, Valdés, Puyol y que llegarían a lo más alto del fútbol mundial…