El premio al portero más inútil del día se lo lleva el guardameta del Wolves por este terrible gol encajado. Pero aún hay más, luego va y se daña la mano al golpear el tablero de tácticas, que es de metal… doble fail!
La cara que se le queda a Zlatan Ibrahimovic después de que Aurelien Chedjou le haga semejante caño es de campeonato. No siempre se puede ser el puto amo, chaval. Lo sentimos.